Sydney. (dpa).- La compañía australiana QantasAirways anunció hoy que toda su flota se quedará en tierra con efecto inmediato por el enfrentamiento con tres sindicatos y reacciona así a la huelga que dura desde hace tiempo.
El director ejecutivo de la compañía Alan Joyce dijo hoy en Sidney que a partir del lunes todos los afiliados a los tres sindicatos serán apartados de sus puestos de trabajo. Y alegó razones de seguridad para suspender la entera actividad aérea.
"Los aviones que todavía están en el aire cumplirán sus vuelos, pero ninguna máquina más despegará ni en vuelos internos y extranjeros en ninguna parte del mundo". A los pasajeros con billete se les pagará un hotel y se les buscará asiento en otras compañías. Los daños se calculan en unos 20 millones de dólares australianos al día, (unos 15 millones de euros/más de 21 millones de dólares).
Qantas acusa a los sindicatos de ingenieros, personal de tierra y pilotos de realizar peticiones "extremas" en relación al incremento salarial y a las condiciones de trabajo. "Están desestabilizando adrede la empresa", dijo Joyce.
Las huelgas ya han costado a la compañía 15 millones de dólares australianos por semana y más de 600 vuelos tuvieron que ser cancelados.
La compañía se adelantó con este paso a los sindicatos, que había anunciado una nueva huelga de 48 horas, que igualmente hubiese paralizado la actividad aérea.
Los trabajadores que han sido apartados no recibirán más su salario a partir del martes. El la actividad se reanudará cuando los sindicatos hayan logrado nuevos acuerdos con Qantas, informó la compañía.
El ministro de Transporte de Australia, Anthony Albanese, dijo que llevará a las partes enfrentadas a un tribunal de relaciones laborales para obligarles a sentarse en la mesa de negociación.
Cuando se anunció la medida, había 7.000 pasajeros a bordo de 64 aviones, 28 de ellos en vuelos internacionales. En total 108 aviones permanecerán en tierra en 22 aeropuertos de todo el mundo.
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